Durante las recientes Jornadas de Producción de Cine Publicitario, Cine&Tele entrevistó en exclusiva a Lucía Peralta, artista especializada en Matte Painting que trabaja desde hace unos meses para Deluxe tras cinco años participando en grandes producciones internacionales. Esta profesional nos explicó la situación del sector en España y en el resto del mundo, así como los detalles del trabajo de los VFX, que se está redefiniendo en la actualidad. Por Carlos Aguilar Sambricio
Una de las ponencias de mayor interés en el evento organizado por APCP (Asociación de Productoras de Cine Publicitario) en Valladolid fue la denominada ‘Creación de mundos imposibles’, protagonizada por Lucía Peralta, una mujer que ha trabajo en compañías como Method Studios, Double Negative y MPC (Moving Picture Company) para proyectos del calado de Aquaman, El libro de la selva, Juego de tronos o Jumanji: Bienvenidos a la jungla.
Ha vuelto recientemente a España y desde el pasado mes de marzo es responsable del equipo de Environment y Digital Matte Painting de Deluxe Spain.
Era, por tanto, una magnífica oportunidad para conocer las diferencias en las maneras de trabajar entre las diferentes industrias, la visión del sector nacional de alguien que ha estado fuera varios años y profundizar en una rama de los efectos que está cobrando una relevancia cada vez mayor.
Cine&Tele: Tú has estado trabajando en diferentes países como Australia o Reino Unido para superproducciones USA. ¿Es el sueño de un artista de VFX trabajar en ese tipo de producciones?
Lucía Peralta: Depende del artista. El mío no lo era.
C&T: Entonces, ¿fue algo casual? ¿No fue un propósito que tú buscases?
L.P.: Yo trabajaba en cosas relativamente grandes en España y también estuve haciendo algo de cine en Bulgaria. Hace cinco años y medio me ofrecieron ir a El libro de la selva. Y dije ‘venga, bueno, vale’. Eso se tradujo en cinco años seguidos trabajando fuera pero no fue un ‘oh dios mío, necesito salir fuera’. Es una experiencia superrecomendable si haces postproducción y ahora mismo sí es el sueño de la gente joven que está saliendo de las escuelas, por ejemplo ir a trabajar a ILM (Industrial Light & Magic) y hacer Star Wars. Doy clases en varias escuelas y lo ves. Pero mi sueño personal no era ese.
C&T: ¿Cómo es vivir ese tipo de producciones desde dentro, en lo que tiene que ver con el flujo de trabajo? Porque hay varios estudios trabajando en un mismo proyecto y con muchos jefes. ¿Estás muy maniatado creativamente? Teniendo en cuenta que, como has dicho, la dirección artística recae mucho en postproducción, debe de ser difícil.
L.P.: Es complicado. Ahora soy jefa de equipo y tengo más responsabilidad creativa. Está habiendo un pequeño cambio en las maneras de trabajar en efectos. Antes hacíamos una parte muy pequeña y ahora cada vez más. Hay una idea pero tienes que desarrollarla. La industria trabaja de tal manera que el director artístico o diseñador de producción no está cuando a mí me llega el material. Lo ideal sería o que yo estuviera en preproducción o que él estuviera en postproducción pero no suele pasar. Entonces te encuentras un briefing de un director y tú tienes que seguir ese hilo creativo.
Cuando trabajas en estudios más pequeños o cuando vas teniendo más seniority y responsabilidad, te dan mucha más cancha creativa, obviamente, pero cuando trabajas en cosas como El libro de la selva está todo mucho más compartimentado. ¿Te dejan? Sí. Yo era senior artist cuando entré en El libro de la selva y sí te dan bastante más rango pero sí que te dicen ‘hay que hacer esto. Cómo lo hagas, es cosa tuya’. En Juego de tronos el equipo era más pequeñito y había que hacer el diseño del arte conceptual por lo que, si sabías hacerlo, te tocaba. Pero la última palabra la va a tener otra persona. La libertad creativa que te dan es relativa. Obviamente, en un estudio de 1.000 personas vas a tener menos libertad que en uno de 20.
Todo se está redefiniendo. En Estados Unidos ha empezado a surgir la figura del VFX Art Director, que es la persona que tiene que continuar la visión del diseñador de producción. Aquí en España todavía no son tan grandes los estudios pero cada vez hay más un peso creativo que se nos está dando porque cada vez se hacen más efectos que no son necesariamente explotar cosas.
C&T: Ahora has venido a España con Deluxe. ¿Por qué has decidido venirte y cómo ves la situación del sector aquí?
L.P.: La veo francamente bien, con mucho trabajo. Llegó un punto en el que pensé que ya me tocaba ir volviendo y en ese momento Deluxe se enteró y me llamó, proponiéndome venir a montar un departamento aquí porque el departamento de efectos iba a crecer. Necesitaban a alguien que se encargase de la parte de entornos digitales, matte painting digital y arte conceptual. Me pareció un reto muy divertido.
Me he encontrado un mercado muy interesante. La verdad es que están entrando jugadores internacionales y cada vez hay más trabajo. Espero no equivocarme pero lo veo al alza. Poco a poco y por suerte, buscar operadores empieza a ser difícil. Antes, pegabas una patada y salía mucha gente. Ahora, todo el mundo está trabajando en una cosa u otra. Creo que eso es algo muy bueno.
C&T: ¿En el uso de los VFX de las producciones españolas hay margen de mejora? Antes no se trabajaban tanto…
L.P.: Sí se trabajaba pero está coincidiendo con que están volviendo las generaciones. Yo soy de la segunda hornada de la gente que se ha ido. Hay gente que se va y se queda y otra que se va y vuelve. Los que volvemos traemos muchos conocimientos y maneras de trabajar que son muy distintas, de producciones de 1.000, 2.000 o 3.000 planos. Eso, obviamente, no se hace aquí pero siempre se puede adaptar.
Empiezas a ver que trabajas con mucha gente que ha estado fuera y yo creo que eso es algo bueno. Y también se empieza a trabajar para producciones mucho más grandes de lo que se hacía antes. El Ranchito ha estado haciendo muchas temporadas de Juego de tronos y tiene muchos premios. Eso por decir uno, pero también está Ilion o la propia Deluxe, que viene a jugar fuerte. De repente, empieza a haber estudios que están trabajando para proyectos muy interesantes.
C&T: El matte painting digital comenzó en los 80. ¿En qué ha evolucionado en los últimos años?
L.P.: Es mucho más multidisciplinar. Antes un matte painter digital con que supiera pintar en Photoshop, ya valía. Ahora no. Tienes que saber muchos más softwares y técnicas, y es muchísimo más multidisciplinar porque estás en medio de todo. Yo creo que cada vez va a evolucionar más hacia ese generalismo. No solamente es pintar, tienes que saber proyectar, tienes que saber un poco de 3D, es decir, un poco de muchas cosas. En los últimos cinco años se ve bastante claro.
C&T: Aquí hay una mesa redonda de mujeres en la publicidad. El mundo de los efectos ha sido tradicionalmente muy masculino. ¿Has notado una evolución positiva en los últimos años
L.P.: Sí, sí, y más que va a venir. Noto una evolución muy positiva en las escuelas, que lo veo porque llevo muchos años dando clase. Cuando yo estudié, de 26 alumnos, éramos 4 mujeres. Y no fue hace tanto (Risas). Y ahora mismo, las clases que doy son un 50-50. Al final, poco a poco, está cambiando ese paradigma de que los efectos son una cosas sólo para tíos. Empiezas a ver mujeres que empiezan a tener seniority e incluso supervisoras.
Obviamente, es un proceso porque desde que empiezas y hasta que te formas para poder supervisar, pasan unos años. En 4-5 años se va a empezar a equilibrar porque esta tendencia ya lleva unos pocos años. Vas viendo cómo las que fueron tus alumnas empiezan a tener seniority y llegan a ser jefas de equipo, y llegará un momento en que serán supervisoras y empezará a ver mucha paridad. No puedes pedir que algo que ha sido 90% masculino de toda la vida, en 2 años se haga 50-50 pero yo estoy convencida de que va a llegar ese punto dentro de no mucho.
C&T: ¿Qué películas, de las que tú no has participado, te han impresionado mucho por sus efectos?
L.P.: Pues Blade Runner 2049 me parece una joyita. Visualmente, tiene un acabado espectacular y me alegro mucho de que se llevara el Oscar. Es de lo que más me ha llamado la atención por el buen gusto.
C&T: Y de lo que has hecho, ¿de qué estás más orgullosa?
L.P.: Es muy subjetivo pero tener un Oscar mola, no voy a mentir. He trabajado en un proyecto como El libro de la selva que se ha llevado todos los premios. ¿A quién no le gusta eso? No significa que sea el proyecto al que más cariño le tengo. Cada proyecto es distinto. Generalmente, estás más orgulloso de los proyectos que más te han costado. El libro de la selva por el Oscar pero también Juego de tronos porque yo quería trabajar ahí y como no hubiera espabilado me quedaba sin serie, que yo fui a la séptima temporada. Llevaba un par de años queriendo trabajar en la serie y además para el estudio Iloura, que son los que hicieron La batalla de los bastardos, que me parece una pieza de cinematografía brutal.
¿Planos a los que le tenga cariño? El que he puesto aquí del dragón en Juego de tronos me parece muy bonito. Luego, hay proyectos más chiquititos que tenían cosas. María Magdalena me gustó mucho y es algo que casi nadie ha visto. Pero cada proyecto, desde dentro, es un mundo. La gente tiene mucho hype con ciertas cosas que igual no son las que a mí más me han gustado para trabajar.
Puedes leer una crónica en profundidad sobre las Jornadas de Producción de Cine Publicitario 2019 aquí. Y si quieres leer una entrevista en exclusiva con el creativo Toni Segarra, pincha en este enlace.
