Cine&Tele ha entrevistado en exclusiva a Pilar Benito, presidenta en funciones de la Asociación Estatal de Cine, desde que Paco Ramos –anterior responsable- acometiese nuevos proyectos. En este mes de marzo hay previstas elecciones en la AEC, que contará entonces con una nueva figura en su presidencia.
Cine&Tele: ¿Podrías describirnos, a grandes rasgos, qué es la Asociación Estatal de Cine y cuáles son sus objetivos?
Pilar Benito: Es una asociación que pretende aunar y representar los intereses de todos los productores de cine españoles. Nuestro objetivo inmediato sería incrementar la representatividad de la Asociación para conseguir interlocución única como industria del cine, frente a todos los organismos públicos y privados, nacionales e internacionales.
También, trabajar para mejorar las fuentes de financiación existentes en nuestra industria, dar solidez a la industria de cine española, que permita a los productores desarrollar y producir todo tipo de proyectos, que vuelvan a representar a España en los Festivales Internacionales, que sigan atrayendo al público español, que se vendan en los mercados internacionales. En definitiva, ayudar a generar una industria sólida, similar a la de muchos de nuestros vecinos europeos.
C&T: ¿Cuántos asociados integran actualmente AEC?
P.B.: Actualmente en torno a 45. Tenemos representantes de todas las Comunidades Autónomas y en la Junta Directiva intentamos que todas esas Comunidades Autónomas estén representadas.
Queremos aumentar dicho número y estamos trabajando en ello. Ahora tenemos como asociados a todos los productores que lideran los listados de taquilla actuales, tenemos a muchos productores, no todos, que representan a España en los Festivales, tenemos productores muy industriales y productores muy artesanos. Productoras grandes y pequeñas, una representación cuasi perfecta del sector de la producción cinematográfica en España.
Desde AEC queremos ser el representante e interlocutor único del cine.
C&T:¿Está llamada la asociación a llenar el vacío dejado por la ya casi extinta FAPAE?
P.B.: Realmente no. Consideramos que FAPAE tuvo sentido en un momento dado donde podían convivir asociaciones sectoriales con territoriales, donde había un Fondo de Cine en el ICAA que permitía hacer un nivel elevado de proyectos, donde las Comunidades Autónomas, a través de sus Institutos de Cine tenían presupuestos que ayudaban a financiar multitud y variedad de proyectos. Nuestra industria está viviendo una gran transformación, que debe ser respondida también con nuevas fórmulas para asociarse y ser representada.
Estamos seguros que podemos llegar a acuerdos con asociaciones territoriales para que sus asociados puedan también participar de nuestra asociación, sin dejar su asociación territorial que, les seguirá representando en sus CCAA, pero nos gustaría que pensaran que AEC les va a ayudar a luchar por un nuevo modelo de financiación para sus películas así como salvaguardar sus intereses como empresarios y representarles tanto en España como fuera. En Europa hay muchos temas muy candentes que afectan y afectarán a nuestras empresas y modelos de negocio y ahora mismo, desde que prácticamente ha desaparecido FAPAE, tenemos un poco abandonada a la UE.
C&T: ¿Cuál es vuestra visión de la situación actual del cine español?
P.B.: Es una visión agridulce. Por una parte “dulce”, entrecomillado, porque la cuota del cine español el año pasado se mantuvo en cifras similares a las del año 2016, en un 17%. Porque parece que cada vez hay más películas españolas que conectan con el espectador español y además porque este año 2017 ha sido el año en el que han destacado nuevos talentos, parece que la industria se rejuvenece y se empieza a dar paso a nuevas caras que, desde sus inicios, conectan con el público.
Pero como decía, también tenemos una visión “agria”, seguimos sin ver voluntad política clara de apoyo a nuestra industria. Por una parte, la dotación al Fondo es raquítica, 30 millones de euros para repartir entre toda la producción española supone que el ICAA tiene que repartir miseria. El año pasado se quedaron fuera del apoyo del ICAA muchas películas y este año podremos estar en el mismo camino si no lo remediamos, estamos trabajando juntamente con el ICAA para ver si se pudiera conseguir alguna dotación extra, aunque no podemos olvidar que en este año 2018 se tienen que pagar las ayudas a la amortización de películas estrenadas en el 2016 cuyo importe asciende a 62 millones de euros.
No podemos dejar de pensar que en el período los años 2016-2018 han convivido dos sistemas de ayudas que han tenido que ser dotados con un cierto presupuesto. Esperemos que, una vez finalice, el sistema de ayudas a la amortización, podamos convencer a nuestro Gobierno para que el apoyo al nuevo sistema de ayudas sea equiparable a nuestros socios europeos. ¡Ahora mismo no les podemos ni mirar a la cara a la mayoría de ellos!
Por otro lado, es verdad que en el año 2017 se mejoraron los incentivos fiscales a la producción, pero aún tenemos que trabajar con el ICAA y la Dirección General de Tributos (DGT) para mejorar y facilitar el acceso a los inversores. Hasta el momento ha habido muchos inversores que se sienten atraídos con estos incentivos fiscales, pero hay que trabajar para que la inversión sea segura, recurrente y no exija a los productores buscar inversión fiscal en cada uno de sus proyectos. Hay que estudiar bien el vehículo que estamos utilizando, estamos haciendo un análisis diagnóstico de cuál ha sido la utilización del incentivo, para medir su eficacia y eficiencia y mejorar ambas de cara al futuro inmediato.
Desde que prácticamente ha desaparecido FAPAE, tenemos un poco abandonada nuestras relaciones con la UE.
C&T: El año pasado fueron menos de 20 las películas españolas estrenadas que recaudaron, como mínimo, un millón y medio de euros, ¿cuál es la opinión de AEC sobre el hecho de que se produzcan alrededor de 200 cintas anuales y cómo es posible financiar las 180 que ingresan menos de un millón y medio?
P.B.: Históricamente somos un sector super atomizado, en número de compañías de producción, en número de películas estrenadas. Sería importante analizar los presupuestos de esas películas estrenadas, estoy segura que la gran mayoría tienen presupuestos muy por debajo del millón de euros, incluso del medio millón de euros, que se ha financiado con ayudas locales, regionales y pequeñas inversiones de lo que yo llamo “friends & family”, así como inversión de los propios productores y directores. Y además, hay que analizar la inversión en copias y publicidad. No todas las películas estrenadas tienen el gran apoyo que reciben las películas en las que participan las TV’s, incluso muchas de ellas tampoco tienen un presupuesto de lanzamiento necesario para alcanzar cifras razonables de taquilla.
C&T: Sobre el tema de ayudas a la producción, Cultura ha preparado un borrador de una Orden Ministerial que pretende mejorar la situación actual, ¿qué esperáis de ella?
P.B.: El borrador ya nos ha sido entregado y, pendiente de pulir varios temas con el ICAA, creemos que podrá estar listo en breve. El problema no es la Orden Ministerial ni lo que en ella se diga, el problema es que la dotación anual es de 30 millones de euros que, como se ha visto en el 2017 y como se empezó a percibir en 2016, son insuficientes para ayudar a todas las producciones que se pretenden hacer en nuestro país. El año pasado se quedaron fuera muchas películas que estaban perfectamente montadas y estructuradas para poder ser producidas, pero se quedaron fuera por esta razón.
Nuestro objetivo para este año será trabajar con el ICAA para que esta dotación se pueda incrementar, si no tendremos otro desastre para la industria española y, se volverán a quedar fuera multitud de proyectos que, de otro modo, ayudarían a crear y solidificar nuestra industria cinematográfica. Nuestra industria es muy rica en diversidad, se producen todo tipo de géneros, con todo tipo de presupuestos, en todo tipo de idiomas (el mejor ejemplo son las finalistas de esta edición a los Premios Goya, variedad en cuanto a idioma, género y presupuesto), pero una dotación insuficiente de ayudas a nivel estatal solo nos llevará a que muchos productores desaparezcan, a que el talento se quede sin trabajo, pruebe suerte fuera de nuestro país y que, en definitiva, no se hagan películas que representen a nuestro país y nuestra cultura en los mercados internacionales.
La dotación del Fondo es raquítica, 30 millones de euros para repartir entre toda la producción española supone que el ICAA tiene que repartir miseria.
Desde hace tiempo lo decimos, el problema es la voluntad política, si existe voluntad política para apoyarnos se generará una industria que devolverá al Estado todo lo que recibe de él, no solo generando impuestos y pagando Seguridad Social, sino mejorando las cifras de empleo, especialmente juvenil que es el gran punto negro de nuestros datos, dando valor a lo que los políticos se hartan en llamar “Marca España”. Conseguir que haya representación española en todos los festivales internacionales de prestigio, tal y como lo conseguimos en el pasado, debería ser una vía en la que deberíamos trabajar desde ya entre el Estado y la Industria Cinematográfica Española.
C&T: Y siguiendo con el tema de ayudas… Recientemente Italia y Alemania han introducido modificaciones en sus respectivas legislaciones para las ayudas a la producción de cine. ¿Qué os parecen estas nuevas reglas? ¿Cómo pueden competir en un mercado global los productores españoles?
P.B.: Pues malamente y claramente en inferioridad de condiciones. La ínfima dotación de nuestras ayudas no permite que podamos entrar en proyectos de coproducción internacional pues no tenemos demasiada claridad, a priori, del dinero que podemos “levantar” de España, lo que genera inseguridad para entrar en esos proyectos internacionales. Lo que han conseguido esos países, y muchos otros, es lo que nos gustaría conseguir a nosotros, mejorar las fuentes de financiación, dar solidez a la industria cinematográfica de nuestro país y conseguir que nuestros productores puedan acudir a los mercados internacionales a buscar proyectos en los que aportar, con seguridad, algo de financiación desde España y generar proyectos internacionales que acudan a dichos mercados a buscar también financiación para proyectos españoles. Todo en igualdad de condiciones con nuestros vecinos y competidores.
Puedes consultar esta entrevista a la representante de AEC, así como otros muchos contenidos de interés, en la más reciente edición de Cineinforme, que está disponible online:
