“En el ICAA hemos tenido que negociar duro con otros ministerios para sacar las nuevas medidas adelante”

8 mayo, 2020

Hoy ha tenido lugar un nuevo encuentro para la industria del cine organizado por Comscore. La intervención de Silvia Anoro en representación del ICAA ha sido el mayor foco de interés de esta charla, por el hecho de explicar en detalle las medidas del reciente Real Decreto-ley, pero también han resultado de gran relevancia las aportaciones de las principales asociaciones de exhibición y distribución, que están demostrando en estos tiempos difíciles la crucial labor que desarrollan.  Por Carlos Aguilar Sambricio

Los encuentros online que está organizando Comscore están siendo seguidos y cubiertos puntualmente por Cine&Tele. El primer evento estuvo dedicado al informe ‘The Road to Recovery’ de Gower Street que refleja el impacto en las salas de cine y cuáles son los escenarios de recuperación, mientras que el segundo encuentro reunió a exhibidores y distribuidores y, entre otras cuestiones, se abordó la necesidad de proponer un protocolo de seguridad para las salas y que la reapertura debería hacerse a nivel nacional, no por regiones. El tercero reunió a la producción para conocer cómo la crisis ha afectado a los rodajes y proyectos o cuáles son las posibilidades y las expectativas de cara al futuro.

El nuevo debate se ha llevado a cabo con el sobrenombre de ‘Planificando la Experiencia Cine Post-Coronavirus’. David Rodríguez (General Manager Spain & Portugal Comscore Movies) y Arturo Guillén (SVP & Global Managing Director Comscore Movies) han vuelto a dar la bienvenida a los profesionales.

Los invitados de esta edición, que ha congregado a 360 asistentes, han sido los presidentes de las principales asociaciones de la distribución y la exhibición en España: Estela Artacho, presidenta de FEDICINE (Federación de Distribuidores Cinematográficos), Juan Ramón Gómez Fabra, residente FECE (Federación de Cines de España); Juan Antonio Mayoral, presidente de NAECE ((Nueva asociación de Exhibidores de Cine de España); y Miguel Morales, presidente de ADICINE (Asociación de Distribuidores Independientes Cinematográficos). Además, el Gobierno también ha estado representado en la mesa redonda con la presencia de Silvia Anoro, Subdirectora General de Fomento del ICAA.

“La labor de las asociaciones y el ICAA en este momento está siendo fundamental para canalizar todas las soluciones de una manera conjunta y efectiva, comunicando a la sociedad que el cine es un entorno seguro para vivir una experiencia única”, ha indicado David Rodríguez.

“Quiero dar las gracias a Silvia Anoro por su valentía porque no es fácil venir aquí a aceptar preguntas de todo el mundo pero es un momento de dar un paso al frente. También quiero felicitar a todas estas asociaciones por el esfuerzo que habéis hecho por llegar a acuerdos que creo que son históricos y son ejemplares para los países que nos rodean”, ha aportado también Arturo Guillén.

Rodríguez ha advertido que aunque hay que tener cautela, “poco a poco vamos viendo la luz al final del túnel” y “vamos teniendo cada vez más noticias positivas”. Guillén no sabe si es apropiado hablar de brotes verdes pero “los informes hasta hace poco reflejaban un encefalograma de muerte pero ahora empezamos a ver actividad y nos debe dar optimismo”.

Rodríguez ha expuesto diferentes gráficos y estadísticas para conocer cómo está el mercado y cómo se compara con otros países. Destacamos especialmente que tanto Corea del Sur como Taiwán tienen los cines operando al 100% de su actividad. En Estados Unidos y Canadá están abriendo poco a poco salas, sobre todo en la zona de Texas. Suecia, Dinamarca y Noruega también están parcialmente abiertos y en unas semanas abrirán en todas las salas.

“Nos ha llamado poderosamente la atención el caso alemán. Han abierto un montón de autocines (68). No son cines al uso pero la gente se ha desplazado. En el fin de semana recaudaron 1,4 millones de euros, que es un 10% de un fin de semana estándar en Alemania. Es interesante a tener en cuenta”, ha relatado Rodríguez.

Otro punto de interés en la introducción ha sido una encuesta en Reino Unido que está realizada al sector, no al público. En este estudio se preguntaba a qué tipo de público puede afectar más esta situación para la asistencia, qué barreras son las que con más probabilidad van a encontrar los espectadores para acudir a los cines, y las comunicaciones que pueden ser útiles, entre las que se han destacado la seguridad, la unidad y la fidelización.

¿Tendrá miedo la gente a volver a las salas? “Viendo el día a día como lo veo en Madrid en cuanto nos han permitido salidas, la gente intenta recuperar sus hábitos. Creo que nuestra idiosincrasia no nos permite vivir con miedo. Será necesaria una adaptación pero más pronto que tarde recuperaremos nuestra vida”, estima Rodríguez.

El núcleo central de este webinar ha sido la intervención de Silvia Anoro del ICAA para abordar el nuevo paquete de medidas. “Este Real Decreto es el resultado de un esfuerzo importante por parte del Ministerio de Cultura. Nos hemos coordinado con las Comunidades Autónomas, nos hemos reunido con distintos agentes del sector y sobre todo hemos tenido que negociar duro con otros ministerios para sacar estas medidas adelante”, ha remarcado.

Anoro ha desgranado punto por punto las medidas contempladas. Un artículo trata la subvención a CREA SGR para la financiación de las empresas del sector. “Hasta este año, CREA SGR avalaba proyectos cinematográficos y audiovisuales pero ahora se le dan fondos para avalar a todas las empresas del sector cultural. Una parte es para avalar proyectos y otra es para financiar las comisiones de apertura de los créditos que se avalen”, ha señalado.

Asimismo, se recogen medidas de apoyo para los trabajadores. “Somos conscientes de que sólo se han introducido medidas para los trabajadores que están en el régimen de artistas, quedando fuera los trabajadores técnicos. Está siendo muy complicado pero seguimos trabajando en ello para que les permita acceder a algún tipo de financiación pero es muy complicado si no están en el régimen de artistas ni en el de autónomos”, ha manifestado Anoro.

En lo específicamente concerniente al audiovisual, unas de las medidas adoptadas son la flexibilización de los plazos de ayudas concedidas, teniendo en cuenta las paralizaciones. “Son medidas que hemos adoptado para evitar el incumplimiento de los beneficiarios de ayudas y los reintegros”, ha expuesto la Subdirectora de Fomento del ICAA.

Hay, por tanto, mayor manga ancha con los plazos de estreno, número de salas, inversión en copias y publicidad, etc. “Hemos flexibilizado exclusivamente los plazos que se debían cumplir en 2020. Por ejemplo, una película que obtuvo ayuda en 2019 pero si no tiene ninguna obligación en 2020, no tiene ningún plazo ampliado. También hemos previsto que, si a pesar de esto, alguna empresa no pudiera cumplir los plazos, nos puede dirigir un escrito con los motivos de la imposibilidad para darle mayor plazo”, ha indicado Anoro.

En cuanto a los proyectos que recibieron ayuda en 2019, los beneficiarios tienen normalmente seis meses para iniciar el rodaje más tres meses ampliables tras el pago de la subvención. Ahora, se determina que el plazo empieza a contar desde el primer día desde que termine el estado de alarma. “Somos conscientes de la dificultad añadida para las coproducciones, por la complicación de rodar en un país extranjero o de que personal técnico o artístico venga a España. En esos casos, nos lo deberán comunicar por escrito y ampliaremos los plazos porque el Real Decreto-ley nos habilita para poder hacerlo”, ha mencionado la representante del ICAA.

Además, resulta de importancia que el segundo pago de las ayudas generales a largometrajes de 2019, que se otorga al inicio de rodaje, se va a adelantar aunque todavía el rodaje no se produzca para quienes lo soliciten. “Tenemos perfectamente controlados qué películas pueden pedirnos este pago adelantado”, ha puntualizado Anoro.

En referencia a los costes de las películas, hay que recalcar que en muchos casos se duplicarán gastos. “Vamos a reconocer todos los gastos, los que se realizaron y no han servido, y los que se tengan que volver a realizar para poder terminar la película o promocionarla. Publicaremos en breve una instrucción de cómo presentar esos costes pero la idea será que se presenten dos costes: el coste de la película normal y un coste complementario de los gastos que no sirvieron”, ha aclarado.

El Real Decreto-ley también incluye la posibilidad de estrenar en plataformas y televisiones y no perder la condición de película cinematográfica, y lo que ello supone para ayudas e incentivos. “Ante la imposibilidad de exhibir la película en una sala de cine y que cuando se reabra va a haber un atasco de películas, hemos previsto esa posibilidad, que aclaro que es de, momento, para estrenos que se produzcan hasta el 31 de agosto. Si se estrena después, perderá la condición de película cinematográfica”, ha expuesto Anoro. Para ello, debe comunicarse el estreno: en qué medio se ha hecho, presentar el contrato y solicitar la calificación y el certificado de nacionalidad.

Uno de los aspectos más comentados del paquete de medidas es el de las ayudas directas de 13 millones de euros para la exhibición, un gremio que nunca había recibido apoyo desde el Estado. Están trabajando en la convocatoria de esta línea de ayudas con la intención de publicarla ya en cuanto reciban el fondo de dinero. “La idea es pagar a quien cumpla los requisitos y después que se justifiquen los gastos realizados como consecuencia de la COVID-19”, ha declarado Anoro.

En la negociación con otros ministerios, como Economía, se determinó que las ayudas estarían supeditadas a una cuota de pantalla de cine europeo del 30%, siguiendo las obligaciones que tienen televisiones y plataformas. Anoro ha expresado que el Reino Unido sigue formando parte de la cuota en el 2020 y se decidirá más adelante qué ocurre para 2021.

El ICAA ya estaba trabajando en la celebración del centenario del nacimiento de Berlanga para 2021. “Como consecuencia del COVID-19, hemos hablado de hacer un Plan Berlanga, que es como un Plan Marshall para el que todavía tenemos que crear un grupo de trabajo con la Academia de Cine. Es un plan a tres años y con distintas actividades para apoyar las industrias audiovisuales”, ha adelantado la representante del ICAA.

Otra de las claves es la modificación de la Ley del Impuesto de Sociedades para mejorar los incentivos fiscales en el sector. “Esto ha sido lo que más nos ha costado negociar con Hacienda porque ellos siempre han sido reacios a aumentar los incentivos”

Anoro ha subrayado que su disposición es la de continuar en la brecha: “No nos paramos aquí, seguimos trabajando en el ICAA para conseguir nuevas medidas. Estamos con los protocolos de rodajes y de salas de cine. Cada empresa deberá adoptar sus propios protocolos de acuerdo a la orden que publique el Ministerio de Sanidad”.

La opinión de las grandes asociaciones

Después de esta exposición clave desde las autoridades públicas, tomó la palabra Juan Antonio Mayoral: “Desde NAECE siempre hemos entendido que debemos caminar juntos. Tenemos un claro objetivo de que ningún cine debe quedarse atrás en la recuperación de la normalidad. Sólo lo haremos si todo el sector lo hace unido”.

En relación a las medidas comentadas, el presidente de NAECE considera que todavía hay algunas incógnitas por resolver: “Por ejemplo, el qué debemos de priorizar, si es el cuándo o el cómo. Un exceso de improvisación puede resultar un problema importante. Sin estrenos de relevancia que animen a la gente a volver a las salas, sería algo nefasto para el correcto discurrir de la actividad”.

Consideramos que las salas de cine tienen que marcar una fecha para estar todos abiertos, independientemente de que haya empresas que decidan abrir antes. Debemos estar todos a una. Marcar una fecha a finales de junio en que todos los cines del país podamos estar abiertos y dar la garantía de un protocolo de seguridad adecuado”, ha manifestado Mayoral.

El objetivo es que haya un protocolo mínimo y que los de todas las Comunidades sean similares. Si hay problemas de uniformidad, estima, podría derivar en complicaciones de inseguridad jurídica.

A continuación, ha hablado Estela Artacho, que ha remarcado que no hay ayudas para distribución en el Real Decreto-ley pero entienden que “la subvención que se ha concedido a los exhibidores para la campaña de asistencia al cine va en beneficio de todos”. Cabe añadir aquí que Anoro ha abierto la puerta a que ellos también se puedan beneficiar de medidas para considerar gastos duplicados.

“Para que los espectadores vuelvan, necesitamos la recuperación de la confianza, y esto entraña que se sientan seguros, y luego están las películas. En ese sentido, los distribuidores tenemos un compromiso total de las distribuidoras de FEDICINE en que confían en la experiencia única de las salas de cine —ha insistido Artacho— Habrá títulos para tener un verano de cine en las salas”.

Hay varias iniciativas de comunicación y de hecho ayer el ICAA lanzó su campaña. Desde FEDICINE aplauden que las televisiones “se están ofreciendo voluntariamente”y han adelantado que ellos están trabajando en una.

Juan Ramón Gómez Fabra ha iniciado su turno de palabra para subrayar la importancia de las asociaciones porque “permiten que tengamos una mejor información entre nosotros, así como para representar y defender nuestras necesidades frente a la Administración y tener una voz coordinada frente al resto del sector”.

FECE está trabajando ampliamente en el plano sanitario. “Hemos desarrollado un protocolo de seguridad que es un borrador y que sometemos a consideración de las entidades sanitarias. Es un modelo para tratar de dar uniformidad a todas la autonomías y que haya las menores diferencias posibles”, ha explicado, justo antes de revistar el decálogo de medidas a las que conviene dar énfasis.

Pero también es esencial el plano económico. “El impacto por estar cerrados ha sido muy fuerte y tratamos de minimizar esos costes”, ha expuesto Gómez Fabra. Según él, son pérdidas de 13 millones al mes sólo con los gastos directos de explotación. En principio, el gasto en personal gracias a los ERTEs y la financiación sí están bastante bien cubiertos.

“Con el ICAA hemos tenido receptividad para nuestras preocupaciones. Han sido recogidas en el Real Decreto con bastante generosidad. Habrá algunos matices que habrá que desarrollar y solucionar”, ha comentado el presidente de FECE.

Gómez Fabra ha destacado también que en el Ayuntamiento de Madrid han salido una serie de ayudas en relación con el IBI, el IAE y el impuesto de tasas de residuos. “Queremos que esto se generalice en el resto de los municipios de España y que los buenos ejemplos cundan”, ha sugerido.

¿Cómo afrontar la reapertura? “El proceso de desescalada es asimétrico y desde luego las empresas tienen libertad para hacer lo que consideren más oportuno. Pero hemos marcado un objetivo, que es que nos gustaría que el 26 de junio estuvieran todos los cines abiertos. Daríamos un mensaje de unidad en el criterio y facilitaríamos el posicionamiento de las distribuidoras”, ha apuntado Gómez Fabra.

La reapertura se apoyará en campañas de marketing y comunicación. “Dado que es una circunstancia nueva, pues ni en la guerra civil se había producido un cierre global de las salas de cine, se requiere una mirada nueva y hemos buscado una consultora externa que nos ayude a analizar el mercado para afrontar la nueva etapa”, ha dicho el representante de la mayor asociación de exhibidores.

Gómez Fabra cree que las primeras dos o tres semanas habrá ciertas dificultades, pero al final volverán a dar el do de pecho. “La esencia del cine no se ha perdido y se recuperará con facilidad”, ha concluido.

Más escueto ha estado Miguel Morales en su intervención, aunque él ya había participado previamente en estos encuentros de Comscore. “Los distribuidores independientes estamos más unidos que nunca y estamos teniendo muchas reuniones para planificar la reapertura”, ha dicho en su introducción.

Ellos también piensan que la reapertura debería ser conjunta. “Aunque se está hablando de la fecha del 26 de junio para que abran todas las salas, hay algunos exhibidores que quieren abrir ya desde el 25 de mayo. Nuestra idea es apoyar a todos los exhibidores, quieran abrir el 25 de mayo o el 26 de junio, pero creemos que si hay una fecha conjunta será más fácil”, ha opinado el presidente de Adicine.

Hay que tener en cuenta que los distribuidores, para poner en marcha una película, necesitan un tiempo para doblarla, subtitularla, pagar la publicidad, la promoción, etc.

A pesar de que pueda haber ciertas discrepancias, Morales cree que hay bastante unión para remar juntos. “Necesitamos generosidad y apertura de mente para volver lo antes posible en las mejores circunstancias”, ha finalizado. Esperemos que así sea.

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