A mediados de mayo saltaba en los informativos del diario ABC una noticia sobre la Intervención del Estado, que avalaba la tesis de una posible causa de disolución de la Sociedad Estatal RTVE por su conflicto de 500 millones de euros con la Hacienda Pública.
En el Consejo de Ministros de la siguiente semana, RTVE recibió una subvención del Estado de cuantía ilimitada, según publicamos aquí el día 21 de mayo.
Al fin, como diría la Ministro de Hacienda, se trataría de cambiar el dinero de lugar. El Estado se lo daba a RTVE y RTVE se lo pasaba a Hacienda. Muy bien resuelto para las cuentas públicas, pero como siempre a cargo de nuestros bolsillos.
Y es que Presidencia del gobierno no podría permitirse ahora, tal y como están las cosas, que su televisión cayese en el descrédito de ser un Ente moroso con una deuda tan grande en el pago de sus impuestos. Máxime teniendo en cuenta que han fracasado sus esfuerzos para crear un nuevo canal de televisión en abierto con el Grupo Prisa. Un canal que ya debería estar en el aire desde marzo, tal y como se anunció el otoño pasado.
Las tensiones entre Presidencia del gobierno y Grupo PRISA han creado tal malestar que dos de los mayores accionistas de PRISA anunciaron hace pocos días, según OK DIARIO, la intención de vender sus acciones. Estos dos son el Grupo francés VIVENDI (12% de PRISA) y el empresario mexicano Carlos SLIM (7% de PRISA).
Por si fuera poco, el nuevo programa estelar de RTVE “La familia de la Tele” no está llegando ni a la mitad de la audiencia prevista, mientras que el buque insignia de TVE1, “La Revuelta”, no consigue despegarse de su rival directo en Antena3TV, “El hormiguero”



También un grupo de trabajadores de RTVE se manifestó recientemente por la manipulación que, según ellos, se estaba produciendo en los informativos del Ente Público.
Probablemente ya estén despedidos. Muchos periodistas independientes podrían sufrir diversas formas de acoso si termina siendo aprobada la Regulación Oficial sobre los medios de comunicación…