Llegamos al final de la 24 edición del Festival de Málaga, una edición que traía por lema «la distancia que nos une», pues repetía el formato amable y seguro del año anterior, y que no sólo se ha caracterizado por su respeto a las medidas sanitarias, también por ser diverso e inclusivo. Una edición que, sobre todo, ha puesto el cine por delante y ha otorgado sus biznagas de oro a «El ventre del mar» y «Karnawal» en una gala a la que no faltó ni Antonio Banderas. Por Silvia Tinoco
El 24 Festival de Málaga puso ayer su punto y final a diez días intensos de cine. ¿Y qué mejor manera de cerrar este segundo año de formato amable pero seguro que con más cine.
«García y García» de Ana Murugarren fue el largometraje de clausura, una comedia de enredo protagonizada por José Mota, Pepe Viyuela, Eva Ugarte, Martita de Graná, Jordi Sánchez y Ricardo Castella. Producida por Blogmedia y Clarq Films y distribuida por A Contracorriente Films, «García y García» nos cuenta la historia de dos Javier García que, por una confusión, acaban intercambiando sus papeles.
“Se trata de una comedia que es un disparate, esa situación de pez fuera del agua”, explicaba su directora en rueda de prensa. Y aunque la trama pueda parecer sencilla, «el guión ha requerido un gran esfuerzo para desarrollar todas las escenas frenéticas de acción y que implicaban una cantidad considerable de efectos especiales», apuntaba la actriz Eva Ugarte.
La sección de documentales también guardaba una última producción para la jornada de clausura: dentro de Documentales Especiales se proyectó «No somos marionetas», del malagueño Julio Espinosa, que en este largometraje ha querido contar la historia de Ezequiel Heras, un joven de 25 años que nació con Síndrome de Down.
En palabras del director, la historia surge con la conciencia del poder que las pantallas tienen para crear estereotipos y para recuperarlos y como una declaración de intenciones en favor de la inclusión.
Y entre una proyección y otra conocimos el esperado palmarés de esta 24 edición del festival. Una edición en la que «El vientre del Mar» de Agustí Villaronga y «Karnawal» de Juan Pablo Felix se llevaron las Biznagas de Oro a Mejor Película. El director mallorquín volvió a casi ni más ni menos que con seis biznagas.
Ya en la gala de clausura, Santiago Segura ejercía de maestro de ceremonias de la última noche de festival, que comenzaba con la emisión de un emotivo video recordando los mejores momentos del certamen. No en vano, el lema de la velada fue «La cultura cura el alma». Y para demostrar que, además de curativa, la cultura también es segura, ni Antonio Banderas se quiso perder la gala.
El año que viene, el Festival de Málaga alcanzará el cuarto de siglo recuperando su lugar en el calendario, pues celebrará su próxima edición del 18 al 27 de marzo de 2022. Si se celebrará sin mascarillas aún no lo sabemos. Lo que sí podemos adelantar ya es que seguramente sea tan seguro, inclusivo y diverso como lo ha sido este año. Ojalá sea, como decía Juan Antonio Vigar en la lectura del palmarés, una «celebración de la vida». Hasta el año que viene.
