El segundo largometraje de Luis López Carrasco competirá en el Festival Internacional de Cine de Rotterdam en la principal sección del certamen. Además, la producción española My Mexican Bretzel y la coproducción con participación de España, For the Time Being, estarán en la también sección competitiva Bright Future.
Tras Los días que vendrán, de Carlos Marques-Macet, el pasado año, España vuelve a competir en Tiger Competition del Festival Internacional de Rotterdam (IFFR, por sus siglas en inglés), esta vez con El año del descubrimiento, de Luis López Carrasco, con producción de LaCima.
En su segundo largo tras El futuro, López Carrasco visita Cartagena para retomar los hechos que marcaron la historia reciente de la ciudad, que hoy en día son condicionantes de la situación socio política de esta región y además van unidos a diversos cambios que están sucediendo en ciudades españolas y europeas.
López Carrasco se enfrenta a otras nueve producciones procedentes de Corea del Sur, China, Países Bajos o Argentina que, como El año del descubrimiento, tendrán su debut mundial en Rotterdam y lucharán por los 40.000 euros, que se compartirá entre el director y el productor de la película ganadora.
En el certamen, que se celebrará entre los próximos días 22 de enero y 2 de febrero en la ciudad holandesa, se encuentran otras dos producciones con participación española, ambas en la también sección competitiva Bright Future, dedicada al talento cinematográfico joven y emergente con su propio estilo y visión. Así, tendrán su estreno internacional My Mexican Bretzel, de Nuria Giménez Lorang, que combina o fragmentos del diario de Vivian Barrett con imágenes filmadas por Léon Barrett entre los años 40 y los años 60 del siglo pasado. Y For the Time Being, de Salka Tiziana, una coproducción entre Alemania, España y Suiza, en la que durante unas calurosas vacaciones de verano en unas montañas españolas, los familiares separados se ven obligados a relacionarse entre sí.
El año del descubrimiento muestra a vecinos, jóvenes y desempleados que charlan en el interior de un bar entre cigarrillos, desayunos y aperitivos. Recuerdan sueños insólitos, comparten preocupaciones laborales y proyectan planes de futuro. El bar se encuentra en la ciudad de Cartagena, en el sudeste del país. A medida que avanza la jornada se escuchan, cada vez más cerca, los disturbios de la crisis industrial de 1992. Ese año se celebraron en España los Juegos Olímpicos de Barcelona y la Exposición Universal de Sevilla, vinculada a la celebración del V Centenario del Descubrimiento de América. El país se presentaba ante la comunidad internacional como un país desarrollado, moderno y dinámico. Mientras tanto en Cartagena las protestas por la crisis adquieren una violencia creciente hasta acabar con una revuelta multitudinaria que desemboca en la quema del parlamento regional. La película se estrenará el próximo año de mano de Begin Again.