El próximo día 21 de diciembre volverá a celebrarse la cuarta edición de El Día más Corto, que este año tendrá como protagonista al guionista y director madrileño. En la jornada más corta del año, por ser el solsticio de invierno, la Academia de Cine proyectará algunas de sus películas.
La Academia de Cine, en colaboración la Coordinadora del Cortometraje Español, vuelve a celebrar El Día Más Corto, un evento anual que ya se celebra con éxito en otros países europeos el 21 de diciembre, día del solsticio de invierno. El objetivo principal es dar a conocer el cortometraje al público mayoritario a través de proyecciones de cine gratuitas en las calles y en todo tipo de espacios: plazas, colegios, museos, hospitales, comercios, bares, etc.
En la jornada más corta del año la institución abrirá su sala de proyección, a las 16:00 horas, para proyectar El secdleto de la tlompeta, Pancho y pincho, Dolor, Servicio técnico, Los Pinkerton y Bienvenidos, seis cortometrajes dirigidos por Javier Fesser, quien, al término de esta sesión de 74 minutos, mantendrá un encuentro con el público.
La Academia, que presta atención al cortometraje en todas sus sesiones durante todo el año, refuerza su apuesta por la que es tarjeta de presentación para numerosos cineastas y caldo de cultivo del futuro, sumándose a esta jornada festiva y reivindicativa impulsada por la Coordinadora del Cortometraje Español
Se trata de un evento abierto, a escala nacional, al que pueden sumarse tanto los agentes de la gestión cultural como cualquier entidad pública o privada y, sobre todo, los ciudadanos a nivel particular organizando proyecciones para sus amigos y vecinos. En 2013 se celebró la primera edición española de [ED+C], con 82 proyecciones en un solo día por todas las provincias de nuestro país. En 2014 alcanzamos las 102 proyecciones y se duplicó el número de asistentes, pasando de 5.000 a 10.000 personas. Además, a través del Instituto Cervantes hubo proyecciones en una docena de países.
[ED+C] cuenta una serie de eventos centrales como punto de partida. A partir de ahí, es la iniciativa particular, privada e institucional, quien llevará los cortometrajes hasta el último rincón, como ya ocurre en los demás países que participan en esta fiesta europea del cortometraje.