Mayor competencia, distribución de contenidos a través de multiplataformas o la transversalidad son algunos de los aspectos que definen el presente del sector de la tecnologÃa audiovisual
El inminente apagón analógico, el desarrollo de la alta definición o la regulación legislativa del audiovisual son temas de los que se viene tratando desde hace tiempo en el sector del broadcast. De hecho, el Salón Profesional Internacional de la Tecnología Audiovisual, Broadcast, que celebra su décimo cuarta edición entre los días 3 y 6 del próximo noviembre, en la Feria de Madrid, es uno de los foros de debate más cualificados sobre todas estas materias y uno de los principales escaparates comerciales donde poder conocer, de primera mano, los últimos avances tecnológicos de esta industria.
Ahora mismo, el sector del broadcast afronta una serie de retos importantes y está viviendo un proceso de cambios, que lleva aparejado una mayor competencia y, consecuentemente, una mejora de la calidad. Asimismo, se generaliza la distribución de contenidos multiplataformas, con mayor número de soportes y más novedosos. Medios que, además, permiten interactuar, con lo cual asistimos a otro fenómeno y es que el usuario deja de ser un mero sujeto pasivo y simple receptor de información, a alguien que sabe lo que quiere y lo pide, gracias a una tecnología que le permite hacerlo.
Todo ello genera una transversalidad, que es la nota dominante del sector, y por la cual se pasa sin solución de continuidad del cine a la televisión o al móvil, entre otros soportes, y que exigen a su vez la elaboración de contenidos específicos.
Nuevos entornos
Esa transversalidad viene propiciada por el desarrollo de las Tecnologías de la Información (TI). Por ejemplo, los nuevos entornos IPTV sirven tanto para la contribución de delegaciones a la central de una televisión como para difundir una programación estable a través de Internet o crear una red de pantallas de señalización digital. A los fabricantes, hasta hace bien poco, les bastaba con dirigirse a un número limitado de canales, para tratar de venderles equipamiento; mientras que de un tiempo a esta parte, asistimos a una proliferación de agentes nuevos que acceden a este mercado, novedosos soportes informativos, más emisoras y canales de todo tipo (desde televisiones locales, corporativas, religiosas, canales temáticos…). Sin olvidar, la eclosión de canales de emisoras de TDT (Televisión Digital Terrestre) de alcance local, propiciada por la obligatoriedad del apagón analógico; la IPTV a través del streaming, canales de empresa (Nestlé, Peugeot, Coca Cola, Instituto Cervantes y un sinfín de empresas y otras organizaciones).
Todos ellos son canales que no entran en la categoría de grandes medios, pero que igualmente requieren de un equipamiento. Por ello y precisamente por el notable incremento de agentes a los que dirigirse, hoy más que nunca son necesarias ferias como Broadcast, para poder llegar a ese target de público profesional, ya que de otro modo, sería muy complicado.
Además, el concepto de broadcast ha evolucionado mucho, pasando del tradicional, que englobaba estrictamente todo lo relacionado con el cine, radio y televisión, hasta aquel que supera el broadcast puro y duro y que incluye otras realidades como IPTV, la televisión móvil, soluciones AV, la television corporate y otras.
Todas estas realidades y su rápida evolución exigen un esfuerzo adicional de flexibilidad y, sobre todo, de creatividad, adaptando los contenidos y mensajes al medio al que van dirigidos, facilitando así una máxima optimización de los mismos. Ahora que una conocida marca española de espumoso ha puesto en boca de todos una solución imaginativa para ahorrar costes, se ha puesto en evidencia que es precisamente el momento de fórmulas creativas, que no implican grandes costes o gastos en publicidad.
En este sentido, hay experiencias relacionadas con el marketing viral, como la que protagonizó recientemente TerraA, que con motivo del 75 aniversario de ‘La Guerra de los Mundos’, de Orson Welles, colgó en YouTube un vídeo en el que se veía a los tripulantes de un pesquero gallego cómo observaban a un caza del ejército intentando dar alcance a un supuesto OVNI. Éste, tras extrañas maniobras, se sumergía súbitamente en el mar. El vídeo que, evidentemente, era un montaje, fue visto por más de 3 millones de personas, superando con creces el logro de muchas campañas publicitarias. Si bien no incluía publicidad explícita, logró captar la atención de una extraordinaria audiencia, fijando luego la misma con otros recursos publicitarios. El mensaje que se puede extraer de este ejemplo, es que hay nuevos formatos que evolucionan a gran velocidad, que exigen innovadoras formas para captar la atención del potencial lector y/o televidente.
Televisión por móvil
Uno de esos formatos que está conociendo una creciente, aunque todavía tímida, implantación es la televisión por móvil. Precisamente los operadores de telefonía, que en principio son los que se beneficiarían directamente de esta nueva vía de negocio, están en dura pugna con los broadcasters, para hacerse con el dividendo digital que quedará libre, a partir del 3 de abril de 2010, fecha en que previsiblemente estará ya operativa únicamente la TDT en España, de acuerdo con las previsiones del Gobierno. En realidad son los broadcaster quienes tradicionalmente han operado esos canales y reclaman, por tanto, el derecho sobre los mismos. Pero como se apuntaba antes, el sector atraviesa un momento de cambios, con la irrupción de agentes diferentes a los habituales y que va a exigir grandes dosis de competitividad, calidad y creatividad, para lograr unos beneficios que, de todos modos, van a verse incrementados al abrirse otras vías de negocio.
Un ejemplo de nueva fuente de ingresos es la conocida como Digital Signage, es decir, la señalización digital, que está experimentando un importante desarrollo. De hecho, está evolucionando desde el tradicional soporte digital para dar un simple mensaje publicitario, hasta servir para distribuir imágenes televisivas, mediante canales temáticos, como Canal Metro, o los que se pueden ver en cadenas de tiendas, en farmacias y un largo etcétera de establecimientos, mientras se espera en la cola de la caja o en otros puntos estratégicos.
Regulación legislativa
Ante este panorama, hoy más que nunca se hace necesaria una regulación legislativa que se viene demorando, al decir de profesionales del sector, demasiado tiempo, y que debe contribuir a clarificar la situación. Hasta el momento, se han ido creando leyes muy específicas, como la del cable o la de la TDT, entre otras, pero se hace necesaria una normativa que unifique todo ese cuerpo legislativo y ese hueco es el que quiere cubrir la nueva Ley del Audiovisual. En su momento, se prometió su aprobación para la pasada legislatura, luego se pospuso para el inicio de la presente y, de momento, el Consejo de Ministros aprobó el pasado día 16 de octubre el proyecto de Ley Audiovisual que aún deberá pasar el correspondiente trámite parlamentario en Congreso y Senado.
Avances tecnológicos
En cuanto a innovaciones, hay avances interesantes, aunque partiendo de que el delicado entorno empresarial actual no es especialmente propicio para generar novedades, sino más bien, para actualizar los productos existentes con nuevas versiones, como se va a poder comprobar en la próxima edición del Salón Profesional Internacional de la Tecnología Audiovisual, Broadcast ’09.
Uno de los terrenos en que los avances se hacen más evidentes es en el 3D o estereoscopía. Si bien el 3D es una tecnología que está presente en el cine desde hace tiempo, en concreto, desde los años 20, durante este tiempo se ha basado en técnicas analógicas que ya se quedan obsoletas. Ahora, con la irrupción del digital, la estereoscopía avanza a pasos agigantados una vez eliminados todos los problemas derivados de la sincronía en la proyección con doble proyector. Además, ahora el 3D se prepara para dar el salto de la gran pantalla al salón de los consumidores.
En HD también se están logrando importantes avances. De hecho, la mayoría de los operadores de televisión nacionales y autonómicos se están sumando a esta tecnología llevando a cabo numerosas pruebas piloto, que supone un incremento notable de la calidad y definición de la imagen.
En cuanto al campo de la postproducción, también se está ganando mucho en definición, sobre todo en lo que se refiere al cine, en donde se están alcanzando resoluciones a 2K y a 4K. En televisión, aunque de momento todavía de forma experimental, se está llegando al nivel más avanzado, con desarrollos experimentales como el impulsado por la NHK japonesa con su Ultra High Definition.
Por último y dentro de este apretado resumen de lo que se está moviendo en el mundo del broadcast, hay que referirse al notable incremento que se está logrando en la capacidad de transmisión de datos con señales 3G.
Texto: IFEMA
